sábado, 29 de enero de 2011

Y ojalá la vida fuera un blog, para dibujarla a tu antojo, porque aquí eres mentira, o eres verdad. Fuerza y coraje, o el pasa la vida que duele o gusta, depende, todo depende, de la lupa, del momento, de la isla o lugar. Pero el dolor, el dolor crea arrugas que no te corresponden, arrugas que solo ves tú, arrugas que solo te disgustan a tí. Y entonces solo quieres escuchar música, beber cerveza y sonreír, sonreír o reír, en cualquier plaza, hasta que se vaya el sol. Porque nadie, absolutamente nadie, elige sufrir en vano. Quién no quiere una sonrisa?

jueves, 27 de enero de 2011

Francés de adopción, español emigrado a la fuerza, hace muchos años, por nuestra realidad de entonces, que yo no viví. Un señor, un señor mayor.

-Señorita, es un verdadero privilegio ver una sonrisa como la suya tan temprano.

-Papá!

- Ja, ja, ja. Señora, no me importa, todo lo contrario. Caballero, lo mismo le digo.

-Una sonrisa muy bonita la suya.

-Gracias, pero no siempre sonrío.

-Pues debería.

- No puedo, no siempre puedo. -

Sí, siempre puede. No siempre querrá, pero siempre podrá sonreír. Señorita, intente tener voluntad, es cuestión de voluntad, de voluntad, fuerza y coraje. Pase lo que pase, sonría. Y ojalá la vida fuera un blog

jueves, 20 de enero de 2011

Que no, que no nazca de mí la lágrima,
que no la rabia, que no el desconcierto.
Que no nazca de mí una noche por delante
deseando que no nazca de mí un mundo nuevo,
algo que deseé con toda mi fe.
Que se puede,que se puede querer algo y no quererlo,
que se puede estar mil veces confundida.
Que quiero estar en la arena,
que quiero tener enfrente un mar que no conozco,
que quiero sentir algo que haga no reconocerme,
que quiero desaparecerme, aunque sea solo un segundo,
desaparecerme.
Y respirar, que me quedo sin mí, que me quedo sin risa,
pero yo quiero la sonrisa, pero yo quiero la sonrisa
y yo lo sé, y no me voy a confundir, no, no.
Que nadie me hará sentir fea, que no lo consiento,
que he andado sobre cuchillos mucho tiempo,
que he andado y es bastante,
y no, no sé dónde voy,
pero eso no importa, eso no importa,
importa la luz que soy capaz de reconocer.

martes, 18 de enero de 2011

La vida,¿ es larga? La vida es larga o es corta?

Es corta, es corta cuándo estás disfrutando, cuándo estás disfrutando o, quizás, también cuando estás a punto de morirte, no lo sé, supongo. Puta vida bonita.

Silencio. Silencio aquí y en mi vida. Yo ahora no hablo. Es mi elección. Quizás sería más fácil. Quizás sería menos doloroso. Sonrisa, sonrisa y risa, y un cuerpo que no miente a nadie.

Nunca protegí más a nadie, en mi vida.

La vida está llena de caminos, cada camino lleno de pequeños actos que la van dibujando. Y ese venirse abajo...ese venirse abajo también es un acto, pequeño y grande, que, a veces no es posible. Porque no es posible venirse abajo cuando tienes que sacar los dientes.
Hoy no es posible venirse abajo. Ni a solas siquiera.


Y llevo todo el día huyendo. Y el humor se perdió con la inocencia.

Y me muero por un abrazo. Pero hoy no. Demasiada garra, y es mentira todo. Demasiada demasiado pronto, no soy más que una niña, en qué estaba pensando. Pero ahora sigo, por inercia, por inercia y esa poquita o mucha dignidad que no me resta el presente.

Mucho amor, mucho amor hacia mí, sí, es verdad. Yo sé que sí, yo también amo. Pero ahora mismo daría la vida mía si alguien pudiera entender que me siento lejos, y por tanto sola, y me siento lejos porque soy una idiota que sigue esperando, a la luz de una luna llena que tampoco entiende. Y noche a noche, os duele?

A mí sí que me duele, me desgarra.

Y que no puedo hacer otra cosa más que esperar.

Y ser la otra.

Porque todo lo que pueda venir, yo no lo quiero.

Y por eso yo callo, ya lo grita betty.